Esta decisión se enmarca en el proceso de reordenación de su deuda por el que ha contratado a PwC y la empresa ha asegurado que la operación "refuerza la solidez de su estructura financiera".
La compañía ha recordado que a 30 de abril, la deuda neta era de 57,2 millones, frente a los 65,4 millones de euros al término de 2023.