"En un año marcado por diversos conflictos bélicos, crisis humanas y desastres naturales, este 5 de diciembre, 'Día internacional del voluntariado', cobra un sentido especial", ha destacado la compañía.
En ese sentido, ha subrayado que la DANA que ha golpeado varios municipios de Valencia y Albacete ha puesto aún más en valor la acción solidaria y el papel esencial que desempeñan los voluntarios para devolver a la normalidad a quienes enfrentan las secuelas de una catástrofe.
"Durante días, las lluvias torrenciales inundaron calles, viviendas y campos, dejando a miles de familias en una situación crítica, pero tan pronto como las aguas comenzaron a retroceder, emergió una nueva marea: brigadas espontáneas de vecinos, jóvenes y mayores de todas las edades, ONG y empresas se volcaron rápidamente para ayudar y apoyar a los afectados", ha añadido.
"El voluntariado es la columna vertebral de las comunidades en tiempos de crisis, una fuerza que moviliza recursos, aporta soluciones concretas y genera un impacto profundo en quienes enfrentan adversidades", ha resaltado la responsable de Acción Social en Indra Group, Marga Fernández.
Con esta premisa, la compañía española ha viajado recientemente a Valencia para participar, en colaboración con la Fundación FDI, en labores de limpieza y reconstrucción en el municipio de Massanassa.
"Estamos profundamente agradecidos con los voluntarios que han contribuido en tareas esenciales, como la limpieza de calles, la reparación de infraestructuras básicas y la entrega de alimentos y materiales básicos a las familias afectadas", ha agregado Fernández.
Así, en las próximas semanas, Indra Group volverá a la zona con voluntarios y profesionales, no solo de Valencia, sino de toda España, para colaborar en estas tareas y otras destinadas "a la reconstrucción emocional de tantas y tantas vidas afectadas", bien sea a través de la preparación de kits de material escolar; la donación de juguetes o la recogida y la entrega de enseres domésticos necesarios en este momento, como menaje o textiles de hogar.
"Lejos de ser una solución puntual, el voluntariado se ha consolidado como una herramienta esencial para preparar a la sociedad frente a futuras emergencias", ha opinado la compañía.
A su juicio, al fortalecer el tejido social y promover una cultura de cooperación y solidaridad, su impacto se ve multiplicado cuando los sectores público y privado trabajan estrechamente.
Además, considera que esta colaboración permite combinar las experiencias en gestión de crisis con los recursos financieros y tecnológicos, dando como resultado respuestas más eficaces y sostenibles ante situaciones críticas.
En este contexto, las administraciones públicas pueden garantizar una respuesta efectiva, que va desde la distribución de ayuda humanitaria hasta la reconstrucción de infraestructuras dañadas.
A su vez, Indra Group ha subrayado que las empresas juegan un papel esencial al fomentar la participación de sus empleados en el voluntariado y movilizar recursos clave para atender las necesidades urgentes de las comunidades afectadas.
Por otro lado, ha incidido en que en la era digital la solidaridad se expande más allá de las fronteras físicas dado que las herramientas tecnológicas están transformando la manera en que entendemos y practicamos la solidaridad, abriendo nuevas posibilidades para construir un mundo más justo e interconectado.
"Organizaciones como Indra Group ya integran soluciones digitales en sus iniciativas solidarias y demuestran cómo la innovación puede potenciar el alcance de la ayuda humanitaria y fortalecer el compromiso social", ha recalcado la empresa.
Además, el grupo tecnológico español ha destacado estos días la necesidad de poner al servicio de la sociedad el talento de profesionales y las soluciones innovadoras que puedan mejorar la calidad de vida de las personas y fomentar la protección medioambiental.
El impacto de estas iniciativas llega a extenderse a áreas clave como la educación, la inclusión social y la sostenibilidad, en las que se trabaja para generar un cambio duradero y positivo.
Un ejemplo significativo de este enfoque integral es la iniciativa 'Tecnologías Accesibles', impulsada por Indra Group y Fundación Universia, que ya cumple nueve ediciones y cuyo objetivo es ayudar a los equipos de investigación de las universidades españolas en el desarrollo de herramientas y dispositivos diseñados para facilitar el acceso y el uso de la tecnología a personas con discapacidad.
Con el mismo objetivo, Indra Group lanzó en 2021 su iniciativa de emprendimiento social, Ventures4Inclusion, en colaboración con la Fundación FDI y Volies, una organización que promueve el cambio social conectando ONG y empresas.
Este programa, que ya ha alcanzado su tercera edición, continúa ofreciendo mentorías personalizadas a emprendedores con el apoyo de empleados del grupo. Su misión es apoyar el diseño de ideas de negocio basadas en tecnología con el objetivo de facilitar la integración social y laboral de personas con discapacidad.
Asimismo, como parte de su compromiso con la igualdad de género en el ámbito tecnológico, bajo el paraguas de Indra Group, se promueven programas dirigidos a potenciar las vocaciones STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Arte y Matemáticas), con especial atención a las mujeres.
Entre ellos, destaca el Programa RADIA, que ofrece formación y mentoría a mujeres con discapacidad, proporcionándoles herramientas necesarias para el desarrollo de habilidades digitales avanzadas.
Además, este programa facilita el acceso a prácticas profesionales en el sector tecnológico, lo que contribuye no solo a reducir la brecha de género en este campo, sino también a reconocer el valor del talento de las mujeres con discapacidad como un componente esencial para construir una sociedad digital más inclusiva y competitiva.
"Indra Group se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU para incentivar otros proyectos tecnológicos destinados a apoyar a ONG y asociaciones. Ejemplos de ellos son el desarrollo de plataformas web, como un sistema CRM, o la creación de la web de la Fundación Integra", ha subrayado.
De manera paralela, la compañía ha trabajado en el registro español de afectados de atrofia muscular espinal y en el diseño de una plataforma que mejora el acceso a la educación online para niños con discapacidad neurológica. Junto a ello, Indra Group fomenta la participación de sus empleados en jornadas de reforestación, limpieza de espacios naturales y actividades educativas para sensibilizar el cuidado del medio ambiente.
En un mundo cada vez más conectado, Fernández afirma que tanto "la participación activa de las personas con discapacidad en proyectos que promueven un entorno sin barreras, como la fuerza del voluntariado en momentos de crisis, son pruebas claras de que la tecnología no solo resuelve problemas inmediatos, sino que también tiene el potencial de construir un futuro más inclusivo, más sostenible y más solidario".