Se trata de "un espacio singular en el que cócteles, creatividad y emoción se dan la mano en dos ambientes diferenciados: un elegante interior y una terraza única en Valencia".
Con acceso desde la calle Pere III El Gran, ofrece un espacio interior en la planta baja del palacete: un salón con cinco mesas bajas, sofás y luz cálida de sobremesa. Desde allí, se vislumbra la cocina abierta de La Salita y la escalera que conduce a su sala principal.
En el exterior, la terraza es una manzana interior rodeada de vegetación, con un bar propio donde los bartenders dan forma a una carta de cócteles "versátil, sorprendente y personalizable". Este espacio, además, funciona como bienvenida a los comensales de La Salita, que inician allí el menú degustación con el pase de aperitivos.