“Hoy en día, todos los días son fin de mes”, afirmó una entrevistada, reflejando el desafío de equilibrar promociones, tarjetas y billeteras virtuales para optimizar las compras. La fidelidad a marcas y comercios es baja: el 88% de los consumidores en marzo declaraba depender de ofertas para consumir, cifra que desciende a 79% en diciembre, aunque sigue siendo significativa.
“Este cambio refleja una mayor apertura a probar marcas alternativas. Además, las billeteras virtuales y plataformas digitales jugaron un papel crucial para facilitar la comparación de precios y maximizar beneficios en cada compra”, explica Ximena Díaz Alarcón, CEO y Cofundadora de Youniversal.
Aunque el consumo racional fue una constante en 2024, las restricciones se relajaron levemente hacia fin de año. Categorías como alimentos no esenciales, ropa y salidas comenzaron a mostrar signos de recuperación. En diciembre, el 88% de los argentinos coincidió en que darse un gusto es fundamental para mejorar el ánimo. En este contexto, las promociones en categorías más “placenteras” y las experiencias accesibles (como salidas grupales económicas) cobraron mayor relevancia, permitiendo a los consumidores sentirse menos limitado, aunque se proyecta que continuará la búsqueda de conveniencia.
El análisis reveló una división marcada: aquellos que pueden cubrir sus necesidades y hasta ahorrar representan el 21%, mientras que un 42% sigue sin llegar a fin de mes. Sin embargo, estas cifras mejoraron respecto a marzo, indicando una leve recuperación económica. Además, un 37% de los encuestados se encuentra en un punto intermedio, logrando equilibrar gastos básicos pero sin margen para lujos. Este grupo ha sido clave en la adopción de estrategias de compra como el uso intensivo de cupones, descuentos y programas de fidelización.
La confianza en segundas y terceras marcas continúa creciendo. En marzo, el 42% compraba estas alternativas, porcentaje que sube al 44% en diciembre. Las marcas líderes enfrentan el desafío de responder con hechos concretos: el 95% de los encuestados considera que los descuentos y precios accesibles son clave para generar fidelidad. “Además, los consumidores valoran cada vez más la transparencia en los procesos de producción y el impacto social positivo, lo que representa una oportunidad para diferenciarse en un mercado saturado, siempre que no implique un mayor precio para la gente”, expresa la especialista.
Aunque el 70% declara que hoy por hoy mira directamente las segundas marcas, las primeras marcas aún tienen un espacio en el corazón del consumidor, siendo preferidas por garantizar mejores resultados 40% (+ en mujeres, + en el segmento de 18 a 29 años y llegando al 58% en el NSE C1), o si es para un hijo (45%) o es para una ocasión especial (23%, llegando a 41% en NSE C1), o da un plus de disfrute (20% en el segmento 18 a 29 años) o es para una mascota, 22%, nuevamente más relevante para el segmento más jóven.
Con una menor percepción de incertidumbre (20% en marzo vs. 12% en diciembre) y más esperanza (el 50% cree que 2025 será mejor), los argentinos buscan estabilidad y un horizonte previsible. En este sentido, se observa una creciente valoración hacia productos y servicios que ofrecen garantías de calidad y durabilidad, así como un interés por inversiones pequeñas pero significativas que brinden seguridad financiera a largo plazo.
“Los consumidores están agotados de lidiar con la incertidumbre, pero también muestran resiliencia y un deseo claro de recuperar el placer y la normalidad. Las marcas tienen una oportunidad única de acompañar a las personas con soluciones reales y cercanas que le permitan disfrutar cada vez más su día a día”, concluye Díaz Alarcón.